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Restaurante Yakitoro : Chicote se reinventa

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Conocimos a Alberto Chicote en la época que dirigía la cocina del desaparecido Nodo (hoy ocupado por The Hall). Fue de los primeros en Madrid en traer la tortilla de patatas desestructurada a su forma, y ensalzó la cocina japonesa con su espectacular tempura con formato torre. Cosechó grandes éxitos y desde entonces hemos coincidido con él en ambientes mucho más alejados del mundo gastronómico y también hemos admirado sus habilidades artísticas con formato de cabreo ante las cámaras. Todo un portento dentro y fuera de la cocina.

Logo restaurante Yakitoro de MadridAsí que hemos esperado unos meses para conocer el nuevo Yakitoro porque nos gusta dar su tiempo al rodaje, como en los coches. Y creemos, por el nivel de ocupación de la sala, que ni siquiera le han dejado tiempo para rodar. El nombre se inspira en las famosas brochetas japonesas, a las que ha aportado un toque español (cambiando el final por toro), igual que hace en su cocina. El Yakitori consiste en cocinar a la brasa todo tipo de carne y verdura siempre y cuando vengan pinchadas en un palito de madera denominado Kushi. Para vuestra curiosidad, muchos trabajadores japoneses disfrutan de un Yakitori y una cerveza a su vuelta del trabajo, simulando nuestro particular afterwork europeo.

El local elegido para este nuevo restaurante fue antaño un after en la misma calle en la que están los ya míticos bares de copas Cock y de Diego. El esquinazo le permite por un lado contar con unas espectaculares cristaleras que dan a la misma calle Reina y a Marqués de Valdeiglesias y por el otro crear una especie de terraza a su entrada para los fumadores (hartos ya de invadir las aceras con sus malos humos).

Nada más entrar te encuentras a la izquierda con la cocina completamente transparente , algo que se agradece enormemente cuando vas a un restaurante y que sin duda contribuye a disfrutar más de la gastronomía (por cierto que esta idea ya la viene aplicando Chicote desde sus tiempos de Nodo y lo que en su día era una novedad hoy ya casi es obligatorio en la alta gastronomía). La sala está bien y simplemente decorada sin estridentes moderneces innecesarias. Amplias mesas de madera para compartir con quien te toque, con un mini estanque interior donde albergar hielo y agua que «acoja» a las cervezas y al vino. Buen homenaje que hace su creador a los maridajes con cerveza, pudiendo elegir entre una amplia carta de estupendas birras nacionales e internacionales en botellas con formato de medio litro, y sólo con ese formato ¡ya era hora de que alguien pusiera a las cervezas en un lugar preferente!

restaurante yakitoro techoLlama la atención el techo, compuesto por una serie de láminas de corcho colocadas estratégicamente para mitigar cualquier exceso de ruido y que las conversaciones entre los clientes sean perfectamente mantenidas sin necesidad de mandar callar al comensal de la mesa de al lado o pedir que hagan menos ruido en la cocina. ¡por fin un local que se preocupa en serio sobre la acústica del restaurante! ¡bravo!

Como estaba lleno, nos dieron asientos en una especie de mesa barra que mira hacia la calle, ideal para grupos de no más de tres… El centro del local está presidido por la plancha donde se cocinan los Yakitoris. Algo que sin duda echará para atrás a más de uno es el olor de la propia plancha, mitigado en gran parte por unos enormes extractores que reducen bastante el mismo, pero no llegan a eliminarlo por completo.

carta,yakitoro,chicote,restauranteLa carta es cuanto menos divertida. Ningún plato supera los siete euros aunque hemos de decir que las raciones son pequeñas, ideales para compartir y probar un poco de todo. Probamos unas muy correctas patatas brava y unas estupendas setas Shitake frescas con salsa de ajo cocido y virutas – de esas que se mueven – de bonito seco ahumado. Como principal elegimos un muy curioso ceviche de pescado para beber mientras se come, una fantástica hamburguesa con una materia prima excelente, y un arroz blanco decorado algo espeso pero con muy buen sabor. Para el postre nos recomendaron un brownie fuera de carta muy sabroso y en su punto justo de cocción.

Del servicio, poco que destacar. Amables pero sin pasarse, sonrientes pero sin carcajadas y agradables sin peloteo. Eficaces y con ganas de ayudar a elegir para disfrutar al máximo de esta cocina española, más que japonesa (si esperas cocina nipona , no acudas a este restaurante, a pesar de su nombre).

¿algo que mejorar? Pues nos imaginamos , ya que nadie nos lo supo confirmar, que las plantas que rodean la cristalera fueron regalos de los amigos del dueño porque tienen escrito en sus macetas toda una serie de mensajes de suerte y bienaventuranza. Convendría cuidar algo más estas plantas que parecen abandonadas a su suerte al igual que algunos aspectos decorativos que llamaban la atención en un restaurante recién abierto (como una balleta olvidada junto a nuestra mesa con su respectivo bote limpia muebles).

Así que ya estáis tardando en reservar (por lo que vemos en su web tiene ya pocas horas libres incluso para septiembre) en este nuevo local en el que conociendo el empeño y duro trabajo de su dueño auguramos todos los éxitos que se merece. ¡ideal para cena con amigos en los que probar nuevos sabores de creación cien por cien española! ¡ nosotros volveremos !

Restaurante Yakitoro
Calle Reina 41, esquina con Marqués de Valdeiglesias (a la altura del Loewe de Gran Vía)
Tel.: 91 7371441 (imprescindible reserva por tel . o a través de su web)
Precio medio: 25 -30 euros.

Logo obtenido de su web y fotos realizadas en el local


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DIEGO ANTONANZAS DE TOLEDO

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